Hay distintas formas de crear una cultura empresarial saludable y segura: después de todo, la salud mental es algo muy personal. Tú y tus empleados sois quienes mejor sabéis qué funciona en tu empresa. Por eso, es importante que investigues de manera constante cómo se sienten tus trabajadores y que reflexiones sobre vuestra cultura empresarial y sobre la dirección que está tomando la organización.
Estas 10 preguntas te ayudarán a pensar en la situación actual y a fomentar el diálogo dentro del equipo directivo sobre la salud mental.
La salud mental es una preocupación constante
La salud mental en el lugar de trabajo es un tema cada vez más importante, sobre todo desde la pandemia. Pero, a pesar de que ahora el bienestar de los empleados recibe una mayor atención, sigue sin entenderse bien por qué ciertas soluciones funcionan y otras no, y cómo estas decisiones afectan a la cultura de la empresa.
Las soluciones a los problemas de salud mental laboral no son inmediatas. En realidad, requieren una atención consciente y constante. La mejor forma de proceder es reflexionar de manera regular sobre la estrategia de tu empresa y las necesidades de los empleados.
Reflexiona sobre la cultura
Reflexionar es un medio para aprender de nuestros errores y experiencias y seguir prosperando de forma auténtica y genuina. Es algo importante para ti, como persona y como líder, pero también para tu organización.
No solo os ayuda a no desviaros de vuestros objetivos y metas, sino que también hace que os centréis en vuestros valores fundamentales y que analicéis si vuestra cultura actual, vuestra estrategia y vuestras iniciativas responden a lo que buscáis como organización. Al reflexionar, podéis hacer los cambios oportunos y mejorar allí donde haga falta.
Asegúrate de reservar tiempo regularmente, por ejemplo, cada cuatrimestre, para reflexionar con el equipo directivo sobre la cultura de tu empresa y cómo la perciben los empleados. Las siguientes preguntas te ayudarán a hacerlo:
- ¿Qué problemas o retos de salud mental han surgido en la organización?
- ¿Hemos implementado las soluciones y el asesoramiento correctos para apoyar a las personas que tienen esos problemas o retos? ¿Son adecuadas las soluciones actuales?
- ¿Hasta qué punto el asesoramiento y las soluciones que ofrecemos se centran en evitar los problemas y los retos de salud mental? ¿Cómo podemos mejorar y hacer sostenibles nuestras actuaciones?
- ¿Cómo podemos hacer que la salud mental sea un tema de conversación aún más frecuente en el lugar de trabajo y que las personas se familiaricen con el tema?
- ¿Qué hacemos si alguien muestra comportamientos inapropiados o tóxicos?
- ¿Cómo nos aseguramos de crear un entorno laboral inclusivo? ¿En qué áreas podemos mejorar?
- ¿De qué manera favorecemos el crecimiento individual de nuestros empleados?
- ¿Qué papel desempeña el equipo directivo en el bienestar de nuestros empleados?
- ¿Cómo podemos predicar con el ejemplo desde el equipo directivo?
- ¿Qué podemos hacer para animar a los empleados a que se ocupen de su salud mental de manera proactiva y preventiva?
Involucra también al resto de la empresa
En el equipo directivo no podéis daros cuenta de todo. No es una crítica, simplemente hace necesario que el resto de la organización también reflexione acerca de la cultura.
Investiga de manera anónima cómo se percibe vuestra cultura empresarial, involucra a personas procedentes de distintos niveles de la organización y a embajadores de la salud mental o pregunta a los empleados por sus necesidades en esta materia.
Puedes llevar sus contribuciones a las reuniones de reflexión. De esa forma te asegurarás de no influir en las respuestas recibidas con tu propia opinión o con la visión limitada que puedas tener como parte del equipo directivo.
La cultura siempre está presente
Puede que no se mencione todos los días, pero la cultura corporativa se implementa a diario. Está siempre presente, consciente e inconscientemente, y cambia conforme lo hace la empresa.
Por eso, establecer y mantener una cultura empresarial positiva y segura requiere invertir tiempo y atención. Y merece la pena, pues una cultura empresarial segura hace que los empleados estén contentos y motivados. En contraste, una cultura poco saludable hace que las personas abandonen la empresa.
Si quieres hacer lo mejor para tus empleados, reflexiona constantemente sobre la cultura, la salud mental de tu personal y el papel del equipo directivo.
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